Ed. Plaza &Janés, 2011 448 págs. |
Galardonada con múltiples premios a lo largo de su trayectoria y precedida por otras publicaciones de gran renombre (La casa de los espíritus, Eva Luna...), Isabel Allende (Lima, 1942), saca a la luz en 2011 El Cuaderno de Maya, novela que surge a partir de una sugerencia, por parte de sus nietos, de relatar una historia contemporánea y de suspenso, bajo un sello juvenil.
La obra narra la historia de una chica californiana de 19 años, Maya Vidal, que bajo una apariencia rebelde y frenética, pasa de una vida ruidosa en Las Vegas a un sórdido silencio en la isla de Chiloé en Chile, tras una adolescencia marcada por las drogas, la delincuencia y la prostitución.
Allí, acompañada por un sobreviviente de la tortura, un perro cojo, y otros personajes inolvidables, Maya Vidal escribe su historia, que incluye la persecución de una banda de asesinos, la policía, el FBI y la Interpol.
En el proceso, ella descubre un secreto familiar terrible, llega a comprender el significado del amor y la lealtad, e inicia la aventura más grande de su vida: el viaje hacia su propia alma.
Según palabras de la propia autora, el contacto con sus lectores, en su mayoría jóvenes, le permitió escribir esta historia con mucha facilidad. Además -nos revela- dos de sus nietas fueron su principal inspiración, no tanto en cuanto a los peligros que afronta Maya Vidal, pero sí en alguna cualidad de la protagonista: una de ellas atlética y aventurera, la otra buena lectora y escritora de poemas, cuentos y diarios, rasgos afines a las de la protagonista.
También según su autora, El cuaderno de Maya no se puede considerar literatura juvenil, por las situaciones tan tensas que padece Maya a lo largo de su historia, cargadas de dureza y violencia. No obstante, el mensaje "sanador", esperanzador que transmite la novela sí es de pleno interés para jóvenes y adultos: la resiliencia, la capacidad del ser humano de recuperarse, tanto física como emocionalmente, tras el trauma; la búsqueda introspectiva y el encuentro de la propia identidad.
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